Cristina Sanz cuenta: «Mi trabajo consiste en generar explosiones medidas de color que permitan, a la persona que observa, iniciar un viaje hacia su imaginación… sentir, volar a un lugar de sensaciones y emociones… rozar el alma de cada una. En un segundo bloque de mi trabajo aparece la necesidad de la visibilización del COÑO. Trabajo con un grabado de un coño simbólico, y experimento ramificaciones a partir de él. Me interesa ver como en función del color, de la forma, se genera una u otra energía. La energía de la vida, del coño, de cada coño. Tenemos tanta energía vital que sale de este lugar, tan sagrado y tan único en cada una. Hemos sido invisibilizadas durante SIGLOS, como mujeres y en concreto en la representación de nuestros genitales. Es importante que esto cambie, poco a poco, pero que cambie. Creo que las mujeres debemos expresarnos, hacernos ver, cada una desde su lugar, cada una desde lo que sienta. En ambos trabajos la esencia es llegar a un no lugar. Vaciar a la persona que observa, permitirla sentir, sentirse. Acompaño a cada acuarela de un nombre y un texto. Entiendo el arte como un viaje sin fin. Cada acuarela es el inicio de un viaje creativo. Por eso posteriormente conecto con ellas, veo que me sugieren, les busco un nombre… unas palabras sobre lo que me hace sentir… podría buscarles una canción, un lugar, otro texto… me gusta la sensación de poder crear sin fin, y poder superponer las creaciones, de forma que cada persona podría dar un nombra a cada acuarela, ponerla un texto, buscarle una canción…

He realizado exposiciones en Madrid, Cádiz y Sevilla. Lo que más me gusta de exponer es poder hablar con la gente que ve la obra, se genera un micromundo lleno de magia, encuentro y creatividad… las acuarelas abren la puerta del sentir, del corazón, del susurro del alma».

Del 23 de mayo al 23 de junio. Inauguración: Viernes 24 de mayo. 20:00 horas.

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